Cuando Lama Gangchen Rimpoché llegó del Tíbet a la India, se comprometió a ayudar a los demás, compartiendo el Dharma según su propio linaje y tradición. Su intención era – y continúa siendo – promover la paz mundial a través del desarrollo de la paz interior.
A lo largo de los años que siguieron – especialmente en los años 70 – tuvo visiones en las que, para compartir el Dharma, él debía establecerse en un lugar que estuviera rodeado por cinco montañas en la parte posterior y un lago al frente. En ese momento no existía ningún plan para ir a Occidente, por lo que buscó ese lugar en India y Nepal. A principios de los años 80, Rinpoche finalmente llegó a Europa y comenzó a adaptar las enseñanzas y prácticas a nuestra sociedad moderna. Su intención era compartir con nosotros las herramientas para curarnos a nosotros mismos y a los demás como una vía hacia la Iluminación. Encontró en esta sociedad moderna un terreno fértil para plantar y regar las semillas de la Iluminación y mantener vivo su propio linaje para el beneficio de todos.
Y así, desde entonces, ha dedicado su vida a nosotros. Buscando constantemente ese lugar con un lago en el frente y montañas detrás para establecer sus actividades.
En 1999, después de comenzar a reconstruir su monasterio en el Tíbet, en el mismo mes de enero, una de sus discípulas y amiga, Patrizia, encontró un lugar con cinco montañas y un lago en Italia, cerca de Suiza – exactamente como le había solicitado Rinpoche. Ese lugar se llamaba Albagnano. Patrizia llamó a Rinpoche en Tíbet para compartir la noticia. El terreno en Albagnano fue visto como un gemelo del monasterio de Gangchen y por lo tanto fue llamado Gangchen Choepel Ling. Una vez que Rinpoche cumplió con su responsabilidad de su vida precedente, respecto a la reconstrucción de su monasterio en Tíbet, se abrieron las puertas para cumplir con la misión de esta vida en el mundo moderno.
En ese momento, con la ayuda de amables amigos, se asentó en Albagnano, donde ha estado viviendo desde entonces. Aquí también se encuentran la sede operativa de Lama Gangchen World Peace Foundation, una ONG afiliada a las Naciones Unidas con estatus consultivo ECOSOC. Rinpoche ha estado invirtiendo su energía en transformar este lugar en la naturaleza no sólo en un ambiente puro, sino también en un lugar sagrado para el peregrinaje, la curación, la práctica espiritual y el estudio. Un centro para aprender, comprender y meditar, donde el Dharma pueda ser enseñado, la práctica pueda ser realizada y, por lo tanto, el linaje se mantenga vivo.
Un linaje se mantiene vivo cuando existen personas que, al seguir las enseñanzas a través de una transmisión ininterrumpida, las ponen en práctica y obtienen las realizaciones. Para que eso suceda, debemos compartir las enseñanzas, comprenderlas y meditar en ellas.
Rinpoche nos ha dado el más grande de todos los regalos: el camino para que nos liberemos de los sufrimientos del samsara y ayudemos a otros a alcanzar el estado máximo de la Budeidad. En otras palabras, nos ha enseñado que desarrollar la paz interior es la única manera de alcanzar la paz mundial. Como dice el propio Rinpoche, “la paz interior es la base más sólida para la paz mundial”.
Para lograr esto, necesitamos centros para estudio, comprensión, meditación y sanación donde podamos tener todas las condiciones necesarias para cultivar nuestras cualidades y alcanzar un estado más profundo de la paz interior. Albagnano Healing Meditation Center se fundó con esta intención y se creó un plan maestro para la curación del cuerpo y la mente en un entorno puro.